jueves, 2 de enero de 2014

Bodas de brillantes para el Cine Club

ESPECIAL ANUARIO 2013

La tradicional institución cinéfila local cumplió 60 años a todo festejo y en pleno plan de desarrollo.

El Cine Club Santa Fe (CCSF) es un mito con forma de agrupación que este año celebró sus primeros 60 años de existencia, sostenido históricamente por la consistencia de su columna vertebral: su enorme masa societaria.


Eisenstein, Visconti, Pasolini y Buñuel son apenas cuatro apellidos ilustres cuyos films fueron proyectados desde la primera época, pero que de tan resonantes deben bastar para dimensionar cuál es el cine que en el Cine América se vio y se ve: los millones de Hollywood fracasan ante el contenido de las vanguardias, cuyas piezas comienzan a circular mucho antes de ser llamadas arte, y acaso no terminan jamás de emocionar luego de haber sido experimentadas.
Durante el siglo XX, las corrientes conservadoras (al mando de gobiernos autoritarios) se encargaron de perseguir y de ensayar la censura. El cine fue víctima de ello, pero no sin oponer resistencia: ya sea mediante sutilezas retóricas, ya sea como en 1982, cuando ante las amenazas de cierre, los socios corrieron a pedir créditos bancarios para auxiliar al América, un lugar que fue comprado gracias a las hipotecas que tomaron, también, algunos integrantes del club.
La pertenencia fue forjada desde el cine mismo, que no es sólo un edificio que espera a ser usado, sino que es una institución que procura contenidos para todos sus públicos, desde los niños a los adultos. Cena, espectáculos y muestra fueron las formas que tomó la celebración de los más de mil socios de un Cine Club que es una referencia para el espectro nacional y latinoamericano.

Con una nueva Comisión Directiva liderada por Guillermo Arch, el CCSF inició en los últimos años una fenomenal remontada en base a ciclos que atrajeron a nuevos socios y a profundas reformas de infraestructura. Entre ellas, las más significativas fueron la compra de una nueva pantalla, de un nuevo proyector digital, de un nuevo equipo de sonido y de un nuevo parque de butacas.

Casi todo es nuevo en el América. Todo menos la pasión de los socios cinéfilos que acuden a las tradicionales funciones gratuitas de los jueves, viernes y sábados, a la espera de palpitar juntos en la oscuridad.


Publicada en Pausa #128, miércoles 18 de diciembre de 2013
Disponible en estos kioscos


No hay comentarios: